Uno de los mejores equipos en el futbol mexicano han sido los Tigres de la UANL, ya que de las últimas siete finales disputadas, han participado en cinco de ellas, consiguiendo el campeonato en tres ocasiones; la primera de visita contra los Pumas, posteriormente en casa contra el América y, por último, derrotando en el Estadio BBVA Bancomer a los Rayados de Monterrey.

En el pasado certamen, el Monterrey se adjudicó el liderato general con 37 unidades, pero detrás de ellos se encontraba el equipo de Ricardo Ferretti que culminó con 32 puntos en la segunda posición.

En la liguilla, los Rayados se vieron muy superiores ante sus adversarios, ya que golearon al Atlas y a Monarcas para instalarse en la final. Mientras que los Tigres sufrieron en cuartos de final al pasar por mejor posición en la tabla ante el León, pero apabullaron al América cuatro por cero en las semifinales.

La gran final

El partido de ida se celebró el jueves 7 de diciembre en el Volcán. Tempranamente en el choque Nicolás Sánchez adelantó a los visitantes, pero al minuto 28 Enner Valencia lo igualó. A pesar de la insistencia de ambos cuadros, sobre todo de los universitarios, ya no cayeron más goles en los primeros 90 minutos.

Para el juego de vuelta los Rayados se querían coronar por primera vez en su estadio y marcaron el primero apenas al minuto dos por conducto de Dorlan Pavón tras el tiro de media distancia. Todo era fiesta y diversión, pero los Tigres se quitaron encima la loza de perder las finales en patio ajeno y realizaron la épica remontada en menos de cinco minutos, debido a que al 30’ Eduardo Vargas realizó el primero y cuatro minutos después en tiro de esquina, Tigres le dio la vuelta dos por uno con gol de Francisco Meza para adjudicarse un título más de liga y coronarse en la mismísima cancha del enemigo.

Actualidad

Unos días después de perder el trofeo, los dirigidos por Antonio Mohamed tuvieron su premio de consolación al derrotar en la final de la Copa MX al Pachuca en el BBVA Bancomer, siendo el primer título en su campo. Hoy en día, los Rayados están clasificados a la liguilla tras cinco partidos consecutivos sin perder y en la pasada jornada, mandaron a la división de ascenso a Lobos BUAP, como lo hicieron en 1996 con los Tigres al derrotarlos en su cancha.

Por otro lado, el conjunto felino también aseguró su pase a la fiesta grande, aunque apenas suma una victoria de los últimos cinco choques, en los cuales de los últimos tres no ha podido ganar.

Ambas escuadras buscarán el triunfo para colarse como segundos generales (combinado con una derrota de Santos). Además, será la primera ocasión que se verán las caras desde aquella final del Apertura 2017.