La derrota del Puebla a manos de Santos Laguna no solamente significó la segunda derrota consecutiva camotera, sino también prendió las alarmas en el cuerpo técnico. La razón: dos de los tres cambios fueron necesarios por lesión debido a los infortunios que sufrieron Carlos Gutiérrez y Robert Herrera.

Esta mañana, Pablo Marini y sus pupilos entrenaron en el Estadio Cuauhtémoc mientras que el doctor Gerardo Toledo analizó el estado físico de Gutiérrez y Herrera.

El defensa central uruguayo "tiene una lesión en el aductor del muslo derecho, por el tipo de lesión y la zona en la que está es una parte muy difícil de descansar, para todo necesitas movimiento de ella", y agregó, "con él tenemos pensado que hoy y mañana trabaje totalmente diferenciado del grupo y mañana por la tarde la haremos un ultrasonido para conocer la magnitud de la lesión que tiene".

La situación del lateral izquierdo es diferente. "En el caso de Carlos Gutiérrez, tuvo calambre en las dos pantorrillas que fue lo que no le permitió continuar, él también hoy trabajó diferenciado, mañana toca trabajo en el gimnasio, hará un trabajo y ver si ya el miércoles pueda estar entrenando con el grupo al parejo".

A decir del galeno, el panorama de estos dos jugadores con cartel titular luce esperanzador. El pizarrón de Marini deberá corroborarlo.