Hablar de Pumas es y será –a pesar de las opiniones divididas– hablar de uno de los equipos más grandes dentro del balompie mexicano gracias a los títulos, las historias, la garra y la entrega con las que se ha fraguado la historia del equipo representativo de la máxima casa de estudios del país.

Fue un 3 de julio, pero del año 1977 cuando el Club Universidad Nacional consiguió su prmer título en la Primera División a tan sólo 15 años de llegar al máximo circuito y con una camada que marcaría historia tanto en el club como en el resto del historial del futbol nacional.

De la mano del estratega húngaro, Jorge Marik, los Pumas de la UNAM terminaron la campaña 1976-77 como líderes del Grupo 2 al sumar 50 puntos.

La liguilla supuso un escenario complicado al tener como rivales a Cruz Azul, San Luis y Atlético Español, sin embrgo, la nueva generación de jugadores que años más tarde serían protagonistas en los empastados de México, sacó la casta y el orgullo.

Leones Negros de la U. de G. fueron el rival de los auriazules en la primera final disputada por el equipo en la máxima división. El partido de ida terminó sin goles y todo se definiría en la vuelta. El Estadio Olímpico Universitario no pudo ser partícipe de la antesala del campeonato debido a una huelga de trabajadores en la UNAM, por lo que los segundos 90 minutos se disputaron en el Estadio Azteca.

Un juego cerrado y lleno de oportunidades fue el que se presentó en el 'Coloso de Santa Úrsula', hasta que Evanivaldo Castro 'Cabinho' rompió la sequía de anotaciones y de títulos después del pase desde la banda izquierda que recibió de Leonardo Cuéllar.

El primer título del cuadro unamita fue un aliciente para continuar posicionándose en los primeros escalafones de la liga mexicana, a tal punto que hoy en día, y gracias a todo lo que devino después de la primera estrella, la escuadra del Pedregal es uno de los llamados "Cuatro grandes".