Diego de Buen ha sido un nómada del fútbol mexicano. Si bien fue inscrito al primer equipo de Pumas en 2008, fue hasta el Apertura 2015 cuando vio sus primeros minutos en Primera División.

Han trascurrido cuatro años de aquel debut y es el mismo número de camisetas que ha defendido. Luego de portar la indumentaria de UNAM, Puebla, Pachuca y Xolos, el mediocampista llega a Torreón con la intención de asentarse en el conjunto de la Comarca Lagunera, donde buscará ser el péndulo del cuadro dirigido por Luis Zubeldía.

"Hoy vengo a Santos con la mejor disposición, vengo para hacer mi historia y tener continuidad, ser un jugador constante y mantenerme en Primera División. El gran plantel y lo que hay detrás puede ser una catapulta que debo aprovechar, tengo que seguir mejorando y debo ganar esa constancia que quiero", mencionó.

Recientemente, Santos Laguna ha sido un animador de la Liga MX, ya que regularmente se clasifica a la Liguilla y es uno de los clubes que contiende por el título cada semestre. Sin embargo, De Buen y sus compañeros no asumen un rol protagónico e, inclusive, se restan presión, pues más que estar obligados a campeonar en el Clausura 2015, es un acicate para ellos poder levantar el trofeo de Liga.

"La gente lo ve como una obligación (ganar el título) pero al interior del grupo lo vemos como una motivación, como algo que queremos, que anhelamos y así las cosas se consiguen de mejor manera, no es tanto una obligación, más con el plantel que tenemos porque seguro pelearemos por el título", dijo.

El canterano puma no podrá darse el lujo de guardarse nada si quiere hacerse de la titularidad, considerando que Jesús Molina y Diego González son sus principales competidores en la búsqueda de ser el responsable de brindarle equilibrio al conjunto albiverde.

"La disputa por el puesto va a estar a lo largo de la semana y los que decida el cuerpo técnico van a ser los que jueguen pero hay mucha calidad, tengo que competir con jugadores de alta calidad y estoy dispuesto a hacerlo", remató.

Con información de Mediotiempo | Alberto Ruíz