La llegada de un jugador extranjero a la Liga Bancomer MX es una apuesta muy difícil, pues podría ser una pésima contratación o ser el mejor fichaje del torneo. Joao Rojas demostró lo segundo en su primer torneo ya que rápidamente desplegó su talento, sin embargo después de algunos torneos con Morelia decidió abandonar el equipo, pero se fue tocado por la Maldición Monarca.

La promesa ecuatoriana comenzó desde abajo su carrera para lograr convertirse en ídolo en cada estadio al que defendía, se forjó poco a poco el tradicional alarido que se escuchaba en las gradas del George Capwell cuando este entraba a la cancha, su hinchada lo admiraba. En su salida a la escuadra mexicana, llegó siendo un foraneo para la afición moreliana, pero pasado poco tiempo logró ganarse el cariño de los seguidores del Monarcas y así ser considerado un ídolo, estaba en lo más alto, pero su caída fue estrepitosa cuando llegó a La Noria con los celestes.

Joao Robín Rojas Mendoza es nativo de La Troncal, Provincia de Cañar, Ecuador. Fue ahí donde se desarrolló como futbolista profesional, empezó jugando para el Municipal de Cañar durante un año en fuerzas básicas.

Después de salir del Municipal, continuó su formación en las divisiones menores del Deportivo Quevedo en donde solo estuvo breve tiempo. En 2007 debutó en la Serie B de Ecuador con Técnico Universitario de Ambato, el mismo año ascendió a la máxima categoría de Ecuador.

En 2008 el equipo del 'Joven Maravilla' descendía, por lo cual fue cedido a préstamo al River Plate de Guayaquil. Un año después volvió a ser prestado a otro club, en esta ocasión fue al Club Sport Emelec siendo este el equipo donde mostró su mejor versión hasta ahora, gracias a ello fue subcampeón de Ecuador en 2010.

El ecuatoriano, ‘pulmón de gato’ obtuvo dos importantes reconocimientos que le fueron otorgados por la Asociación Ecuatoriana de Radiodifusión (AER), dos veces fue nombrado como Mejor Jugador Juvenil de la Serie A de Ecuador.

Por su talento, condición física y una estupenda manera de encarar al adversario, Rojas llamó la atención en Europa, pero su siguiente casa fue en México con Monarcas Morelia. La primer temporada en el cuadro rojiamarillo logró un subcampeonato, además anotó un gol en la final contra Pumas.

Con los ates consiguió establecerse de un nombre en el Fútbol Mexicano, sus números reflejaron el talento que posee. Con la armadura de los Purépechas anotó 27 tantos en 94 partidos, de los cuales 4 fueron en competiciones internacionales, pero no fueron sus goles lo que lo hicieron brillar, sino su participación aguerrida en la ofensiva y en la defensiva.

A nivel selección ya había sido convocado en el 2008 en un amistoso, a pesar de su potencial ofensivo, Joao no anotó gol hasta el 2010. Con Morelia tuvo una buena etapa y nuevamente fue convocado a Selección, desde ese entonces sus apariciones con la máxima son concurrentes.

Muchos equipos seguían el paso del talentoso 10 de los Monarcas para sumarlo a sus filas, no fue hasta el año 2013 donde se aceptó la oferta del Cruz Azul y su traspaso se hizo inminente.

Llegaba con el cartel muy alto, pues con los michoacanos había logrado destacar a nivel nacional e internacional, sin embargo su poderió no ha sido desplegado en su totalidad.

Con los cementeros ha tenido números regulares, el torneo Clausura 2013 anotó 6 tantos en 15 partidos que disputó, aunque sus goles digan lo contrario, Rojas no se ha podido consolidar como el jugador diferente que hasta ahora había sido en sus anteriores clubes.

En la actualidad sigue jugando con el Cruz Azul, dando partidos modestos y en ocasiones flojos. El gambeteo y la velocidad que lo han caracterizado no se ha visto demostrado aún con La Máquina Cementera, una obra más de la Maldición Monarca.