La historia de Jaime Lozano, la Selección Mexicana y el súbito altibajo en aquel turbulento año pre-mundialista es casi incomprensible. Y es que, el hombre que estaba en los Pumas de la UNAM en ese momento, tuvo que sufrir los ataques en 'dos bandas' entre Ricardo La Volpe (en aquel momento el estratega tricolor) y Hugo Sánchez (flamante bicampeón con los universitarios).

Pero el gran 'Jimmy' solo tuvo que hacer un gran encuentro, un partido glorioso, para que el inconsciente colectivo lo tuviera en la cúspide de los grandes héroes del tricolor. Ese encuentro fue el 9 de febrero de 2005.

El dato era el de siempre: México nunca había podido conseguir una victoria ante Costa Rica en su casa. Era un territorio prohibido y del cual se le tenía tal temor. Sus dos actuaciones previas le daban pocas chances, pues para Francia 98 y Corea-Japón 2002 solo pudieron sacar empates sin pena ni gloria.

Lozano, peleando el balón en tierras ticas (Foto: Goal)
Lozano, peleando el balón en tierras ticas (Foto: Goal)

La Volpe creía en su 'proceso' y entendió lo que Lozano podía dar por la banda izquierda, aunque el 'Bigotón' a veces lo alternaba en funciones de contención. Vendría el momento del auriazul al minuto 8, cuando pudo pararse en su especialidad de tiro libre y le puso el balón pegado al poste izquierdo a Mesen para el primer gol. Era la locura para los dirigidos por el argentino.

No conforme con ello, 'Jimmy' le puso la cereza a su gran actuación un minuto después, al meter un soberbio cabezazo que volvió a perforar las redes con un gran centro de Salvador Carmona. Aunque el local pudo acercarse al final del primer tiempo, el destino estaba escrito y los aztecas se llevaban la victoria, casi 60 años después de disputarse por primera vez estos cotejos.

Aunque momentáneo, Lozano sería una pieza clave de La Volpe hasta antes de la lista final para la Copa del Mundo de Alemania 2006, donde fue borrado de manera sorpresiva para estar entre los 23 elegidos. Podrá haber sido un ajuste de cuentas donde no tuvo nada que ver o una de las grandes locuras del pampero. Es entendible que, de lo único que los analistas deportivos recordaban, es que el 'Hecho en CU' fue el que hizo 'caminar' a México, en un inicio, y que le hacían parar casi al llegar a la meta.