Dentro de las buenas noticias que recibió el Club León en el ya conocido mercado de piernas, fue la llegada de cuatro muy buenos jugadores, sin embargo, la que no acaparó muchos reflectores pero que sin lugar a dudas dará de que hablar durante el torneo regular, es la incorporación de Osvaldo Rodríguez al conjunto esmeralda. 

La historia de este lateral inició como la de cualquier otro, pues el estar jugando futbol en la escuela y fuera de ella, era algo común para él y para su familia. A una muy temprana edad, Osvaldo tuvo el honor de representar al estado de San Luis en un torneo nacional, mismo que terminaría catapultándolo al club de la Bella Airosa. Teniendo solamente 11 años de edad, Rodríguez obtuvo el apoyo de sus padres para seguir sus sueños y así, unirse al Club Pachuca. 

Ya en Pachuca, el originario de San Luis Potosí comenzó disputando en dos ocasiones el Torneo de Fuerzas Básicas Sub-15 de la LIGA Bancomer MX. Conforme crecía y perfeccionaba sus habilidades futbolísticas, el lateral mantuvo altas las expectativas en las categorías Sub-17, por lo que fue llamado a representar a nuestro país. 

Su primer llamado con la Selección Nacional fue en el 2012, en donde representó a nuestro país en varios torneos internacionales, pero su logro más importante fue el haber vestido "la verde" en el mundial Sub-17, disputado en los Emiratos Árabes Unidos en el 2013. Pese a que el combinado tricolor se quedó con el segundo lugar de aquel torneo, Osvaldo no bajó la cabeza y continuó buscando la oportunidad de debutar en nuestra primera división.

El ya anticipado objetivo, le costó un poco de trabajo a este jugador, pero tras un gran esfuerzo y mucha dedicación, consiguió hacerlo bajo el mandato de Diego Alonso. El tan esperado día fue un 15 de agosto, cuando los de Pachuca recibieron a los Pumas de la UNAM, teniendo a Osvaldo Rodríguez en el cuadro titular. El equipo terminaría perdiendo el partido por marcador de 1-2, en donde el oriundo de San Luis jugó 74 minutos del encuentro. 

En aquel Apertura 2015, su buen momento futbolístico fue respaldado con buenas actuaciones, jugando un total de 11 partidos. Lamentablemente para él, los de la Bella Airosa reforzaron la banda por la cual el se desempeñaba para el Clausura 2016, dejándolo sin oportunidades de jugar  ni un minuto en el torneo. No obstante las ganas de trascender y seguir adelante lo impulsaron a obtener una nueva oportunidad, jugar y demostrar su nivel, pero ahora en el León.