Al Club León le gustó vencer a los Rojinegros del Atlas. Este sábado, en la jornada 15 de la Liga Bancomer MX y ante las miradas del estratega nacional, el marcador terminó 2-1 en un choque que fue simplemente de más a menos, que diluyó en su espectacularidad.

De entrada, el cotejo había arrancado con una mejor entrada que la de tres días atrás y mucho mejor, futbolísticamente hablando. Apenas al minuto de juego, Arizala contraatacó y se encontró con una falta de González en los linderos del área que fue bien aprovechada por el ‘Fideo’ Álvarez, quien puso el balón en el ángulo del portero, que otorgó displicencias.

Así, el partido pintaba para bueno, pues la Fiera encontró respuesta rápidamente. Al 7’, Miguel Ibarra apareció por la banda, en un pase de Peña, para mandar el balón pegado al poste ante el lance de Fraga. El empate llegaba pronto y era un presagio de lo que se venía.

Tras esto, el local encontró estabilidad en la cancha y se fue al frente, para diez minutos más tarde meter el dos por uno en una brillante jugada de Gonzáles por la banda, quien centró en diagonal para Mauro Boselli; éste, no desaprovechó y solamente empujó el esférico con la parte interna. El marcador ya estaba 2-1 antes del 20’.

El trámite era de ir y venir, aunque los Rojinegros se volvieron superiores. Pronto encontraron ocasiones y hasta una expulsión de Ignacio González, quien desde antes ya se veía tenso y no controló su desesperación en una jugada en que lo techó el balón y en la que cometió falta sobre Arizala al límite del área.

Los decibeles vieron una disminución ya en la recta final del primer lapso, que sí terminó calientita en cuanto al tema de la grada. En ese entonces, Pizzi había cerrado con un ajuste en su esquema, ubicando a Gonzáles como lateral derecho y a Magallón como segundo central.

El complemento inició con un ritmo un poco más lento, a comparación del que tuvo el primero, aunque con constantes llegadas del conjunto visitante al arco de Martínez. Los cambios, por parte de los de casa, aparecieron; entre ellos, se dio el ingreso de Bueno y la salida de Peña y Boselli, que ya apuntaban a la final de la Copa MX ante Chivas del miércoles.

Los reflectores comenzaron a apuntar a otro lado por algunos momentos, y es que la presencia de Juan Carlos Osorio, actual técnico de la Selección Mexicana, llamaba la atención hasta de la lente de VAVEL México, que lo pudo captar.

El dominio atlista de veía y se sentía, pero no veía frutos ante el más que movido parado táctico de Pizzi, que atacaba solamente con Marco Bueno y con Darío Burbano, que había ingresado de cambio.

El pitazo final llegó y, ante los ojos de Juan Carlos Osorio, los Esmeraldas sumaron tres puntos más a su estadística en busca no solamente de una Liguilla rápida, también de una calificación a la Copa Libertadores. Lo irónico fue que el triunfo se consiguió ante el cuadro de Gustavo Matosas, quien después de un año volvió a pisar el Nou Camp en uno de los duelos más esperados por la gente, pero de los más flojos en cuanto a asistencia.