El Estadio Nacional de Costa Rica fue el escenario para el último partido de eliminatorias mundialistas entre Costa Rica y México, enmarcando la derrota de los mexicanos en una noche triste, en la que estuvieron fuera del mundial durante unos minutos, volviendo a la vida gracias a los goles conseguidos por el representativo de Estados Unidos.

El árbitro dio el silbatazo inicial y el primer intento de peligro lo buscaron los mexicanos, de modo que Bryan Ruíz resultó amonestado apenas pasando el primer minuto de juego, a partir de ahí todo cambió y México perdió valor en el terreno de juego, dejando que Costa Rica dominara las acciones del encuentro.

Se cumplieron los primeros quince minutos del encuentro y Costa Rica ya se había acercado un par de veces a la meta de México, mientras que los visitantes su mejor opción la tuvieron al diecisiete, algo que se convirtió en una gran falla después de que al quedar solo frente al arco, el ‘Chicharito’ no logra concretar, Peralta remata en fuera de lugar, anulando así la anotación de los mexicanos.

Después de intentar una y otra vez, finalmente el primer gol de Costa Rica llegó al minuto veinticuatro en los pies de Bryan Ruíz, ante un grave error de Márquez y Layún, los cuales dejaron pasar a Ruíz por en medio de ellos, para que éste empujara el esférico por en medio de su meta y adelantar a los locales en el marcador.

México respondió rápidamente y consiguió el empate al veintiocho, tras una nueva falla del ‘Chicharito’, en la que Oribe, siempre atento respondió a la falla rematando de pierna derecha para perforar la meta de los locales y conseguir el empate momentáneo.

El resto de la parte complementaria continuó de la misma manera, con un equipo de Costa Rica con más idea en el terreno de juego, teniendo su última oportunidad en el cuarenta y cinco, en un tiro raso de Bolaños que salió apenas unos centímetros por un lado del arco de Ochoa para irse al descanso.

Pese a lo que se pudiera pensar, México no logró cambiar su estilo de juego y los locales avisaron su peligro en el minuto uno de la parte complementaria, ante una buena intervención de Guillermo Ochoa.

Vucetich buscó de nueva cuenta la gloria en los botines de Raúl Jiménez, ingresándolo al terreno de juego en lugar del ‘Chicharito’ Hernández, hombre que lució un tanto perdido en la cancha; contrario a la reacción mexicana que se pudiera esperar, el segundo gol de los costarricenses llegó al sesenta y cuatro, cuando Álvaro Saborío remató el magnífico centro de Gamboa, para con esto poner el dos a uno en el marcador.

La noche se vino para México, quienes estuvieron fuera del mundial durante algunos minutos, volviendo a la vida gracias al gol del nacido de padres mexicanos, Michael Orozco, en el partido de su selección frente a Panamá.

Los últimos minutos del encuentro fueron angustiantes, los mexicanos intentaban robar la pelota sin lograr pasar del medio campo, cuidando que los costarricenses no hicieran una jugada en contra golpe, además de contar con la grata presencia de Guillermo Ochoa, quien estuvo siempre atento en el momento que fue requerido; México vivió los minutos más angustiantes de su historia, hasta que de nueva cuenta un par de goles de Estados Unidos le dieron el pase a México para el repechaje frente a Nueva Zelanda, devolviéndole la vida a los mexicanos, los cuales fueron avisados en todo momento de los goles del país vecino.

Finalmente, el árbitro decretó el final del encuentro y México consiguió un sufrido pase al repechaje rumbo a Brasil 2014, un repechaje quizá no justo, pero sí muy necesario, un repechaje que hace soñar de nueva cuenta a México.