Veracruz avanzó a la final de la Copa MX tras derrotar al Atlético San Luis con un contundente 3-1, en lo que significará una gran oportunidad para los escualos de abrir las vitrinas por primera vez en más de 50 años.

Al respecto, Rodrigo Noya se mostró satisfecho por lo obtenido, sin embargo, descartó por cuenta propia que esto borre el mal paso que el equipo lleva en Liga: "El equipo se comprometió. Sabíamos que nos había costado mucho durante todo el torneo. Obviamente esto no salva lo que ha sido la Liga, seguimos preocupados, pero creo que tanto la afición como el equipo se merecía una victoria así y más en casa".

Sobre las críticas que ha realizado la afición en los últimos meses, el central le restó importancia, al tiempo que agradeció a todos quienes los han apoyado: "Nosotros no estamos para callar bocas ni le vamos a decir nada a nadie. Agradecemos a la gente que ha estado en las buenas y en las malas. Es un poquito de alegría y ojalá le podamos dar un campeonato".

El argentino negó tener algún rival preferido para enfrentar en la final, asegurando que su mente sólo piensa en Santos, próximo rival de los escualos en Liga: "Para ser campeón hay que ganarle a cualquiera (...) El que sea es duro, pero con tal de levantar la Copa, el que venga. Nosotros ya hicimos nuestro trabajo. Ahora ya tenemos que pensar en ganar el viernes en Torreón y después ya será la final".

Por último, Noya se mostró ilusionado ante la primera final que enfrentará en su carrera, recalcando que luchará por poder jugarla: "Sería una felicidad tanto para mí como para todo el plantel. Es la primera final que estoy cerca de jugar. Esto no termina, hay que seguir luchando y entrenando a full, para que el día que al profe le toque tomar la decisión, tratar de estar dentro de los once, o si no acompañar y apoyar de donde me toque estar", finalizó.