Comenzó la jornada 9 del futbol mexicano en esta noche de viernes y, el Estadio Kraken quería ser testigo del primer triunfo de Mazatlán en el presente torneo, pero la tarea era complicada ya que enfrente tenía nada más y nada menos que a los Pumas que estaban urgidos de un triunfo que le diera continuidad al proyecto de Rafael Puente del Río. 

Todo comenzó en punto de las 21 hrs. y, el equipo liderado por Rafa Puente, comenzó con la posesión y al minuto 5, llegaron las primeras jugadas de peligro donde tras una jugada que dejó a Dinneno en el área chica, el argentino se daba la media vuelta para sacar un tiro que pasaba se estrellaba en Nicolás Vikonis.

No tardó mucho la segunda llegada al minuto 12 con un pase filtrado a Higor Meritao, pero la salida del portero local, evitaba el primer gol de la noche.

Pumas seguía insistiendo con constantes llegadas de parte de Del Prete y de Eduardo Salvio, sin embargo, los cañoneros supieron contener los embates de los universitarios, siendo Nicolás Vikonis el héroe del primer tiempo y Oswaldo Alanís el mejor hombre en defensiva con tres rechaces de cabeza dentro del área.

No obstante, ya cerca del final del primer tiempo, el conjunto morado encontró un contragolpe que significaría el gol de la ventaja, donde Nicolás Benedetti controló y definió perfecto ante la salida de Sebastián Sosa.

 

Segundo tiempo

Ya para la parte complementaria, el empate llegaría muy rápido gracias a Toto Salvio. Los de Universidad Nacional empataron el duelo gracias a un balón al movimiento de Eduardo Salvio, quien definió en dos tiempos y batir finalmente a Vikonis

 

Las emociones no acabarían ahí y el partido se jugaría de forma más intensa. La remontada de los unamitas se haría realidad al 74' donde los del Pedregal volvieron a pisar el área para que Juan Ignacio Dinenno le robara el balón a Gustavo del Prete, para definir cruzado ante la salida de Vikonis y poner el 1-2.

No obstante, Rafa Puente cerraba sus líneas y lo pagaría caro al 95' donde, gracias a un cabezazo de Néstor Vidrio, Mazatlán encontraba el empate. Sin embargo, tras una revisión en el VAR, el silbante anulaba la anotación por fuera de lugar y el partido terminaba en otra derrota para los mazatlecos.

La apuesta

Previo al comienzo del partido, el dueño del equipo de la Perla del Pacífico, Ricardo Salinas Pliego, bajó a los vestidores del Estadio Kraken para poner sobre la mesa una apuesta con los jugadores con la intención de motivarlos para vencer a los Pumas. La apuesta consistía en que si Mazatlán perdía, los jugadores debían pagarle dos carritos de golf. Pero si los cañoneros lograban el triunfo, Salinas Pliego les repartiría 300 mil dólares entre la plantilla.