Marchan último de la general y onceavo en la tabla de cocientes, producto de 15 partidos jugados dando como resultado  2 ganados, 4 empatados y 9 descalabros, situación que al inicio del torneo no se tenía prevista.

Hoy, las aguas en la Madriguera comienzan a tambalearse, al grado de poner en duda la continuidad de Gustavo Costas y varios jugadores  que no se han logrado encontrar dentro del rectángulo verde.  Es cierto que el equipo quedó matemáticamente eliminado en su derrota frente a las Chivas, y el sábado sellaron lo que se veía venir frente al conjunto del Bajío.

Jugadores inician, jugadores que no terminan, tal cual ocurrió el torneo anterior de la mano de Gustavo Matosas, que en la fecha 2, revolucionó a todo el plantel enviando a los estelares a la banca. Lo que a la postre ocasionó que el Zorro se quedara fuera de toda posibilidad de buscar título, situación que viene ocurriendo desde que Grupo Azteca adquirió el equipo y todas sus vertientes.

Es preocupante que aún no se tenga un plan de trabajo de pies a cabeza, que torneo a torneo se tenga que mover desde el área técnica hasta el delantero. La ideología que caracterizó al club en los últimos años ha sido la cantera y esta se encuentra muy por debajo de clubes como Chivas, Pachuca y Pumas.

Se vienen cambios drásticos por undécima ves, para pelear ahora sí, por al tan ansiado trofeo que por tantos años se le ha negado a tan histórica institución. Retomar las bases sería lo más sano para salir de este bache, resalta la calidad que muestra el juvenil Gaddi Aguirre, quien se ha logrado consolidar en la zona baja, rezagando en la banca al ferrio argentino Walter Kanneman, que seguramente es un candidato serio para dejar las filas Rojinegras.