Venezuela le hizo los honores al invitado de CONCACAF, Jamaica, sobre el que se impuso apenas por la mínima en el duelo de apertura del Grupo C, el cual comparten con México y Uruguay.

El partido arrancó de forma pareja, Jamaica demostró porqué la isla comienza a verse como un rival duro de vencer. Apenas al minuto 10 Johnson hizo temblar el marco venezolano con un cabezazo, poco después Donaldson mandó otro remate de cabeza al segundo palo, pero no pudieron prosperar.

La cosa se puso más mala para los de Jamaica, cuando apenas al 23’ Rodolph Austin se hizo expulsar por una dura plancha contra Tomás Rincón. No obstante, los ‘Reggae Boyz’ siguieron tendiéndose al frente buscando el gol del empate.

Los que si aprovecharon fueron los ‘vino tinto’ que desbordaron a velocidad luego de que Josef Martínez recibiera el pase, el jugador de Venezuela sacó un zurdazo que se coló por debajo del meta jamaiquino y terminó con las inercia de juego que traían los de Jamaica.

Jamaica respondió con lo que mejor saben hacer, desplegar a velocidad para atacar al rival. La potencia física de los de CONCACAF resultó un duro dolor de cabeza para los venezolanos que no obstante pudieron imponerse y sacar los tres puntos.

Con este resultado, Venezuela ocupó momentáneamente la cabeza del grupo hasta que fue desplazado por México, quien también sacó el triunfo, no obstante, tras anotar tres tantos por uno en contra, supera por diferencia de goles a la ‘vino tinto’.

Para la siguiente ronda, Venezuela abrirá las hostilidades del grupo enfrentando a un poderoso Uruguay que llega herido luego de su derrota ante México, por lo que no aceptará menos que una victoria ante la ‘Vino tinto’, pero de ganar, podría estar asegurando su pase a la siguiente fase.

Por su parte Jamaica enfrentará a un viejo conocido, México, repitiendo la final de la Copa de Oro. Tarea nada fácil para los ‘Reggae Boyz’, quienes si quieren continuar con vida tendrán que vencer a un equipo al que en nuevo juegos de historia apenas le ha sacado una victoria, un empate, por siete dolorosas derrotas.