El arranque del Apertura 2015 en el Estadio Caliente no tuvo su mejor inicio al ser inaugurado con una derrota por parte de los Xolos de Tijuana ante los Dorados de Sinaloa con un marcador de 2-1.

Teniendo la vista privilegiada de ver el funcionamiento del equipo desde el fondo del arco, el guardameta Federico Vilar consideró que el rendimiento de Tijuana se desvaneció para la parte complementaria tras haber cerrado de buena manera la primera mitad.

Habíamos hecho una primera etapa con buen juego, intensidad y llegadas al arco. Ya en el segundo tiempo no lo pudimos mantener”.

Alterando su alineación desde su banquillo, las modificaciones del estratega Rubén Omar Romano parecieron haber traído confusión en sus jugadores que terminaron por verse desubicados en el terreno de juego; a lo cual el arquero no considera como una excusa valida.   

“Nosotros tenemos que estar dispuesto a todo y entender rápido lo que el entrenador quiere. Tenemos que seguir trabajando para poder encontrar tanto el funcionamiento como la idea y así empezar a conseguir puntos”.

Con descalabros consecutivos para iniciar la temporada, el portero argentino considera que a pesar de no estar presupuestado, el equipo tiene bastante tiempo para trabajar y revertir la situación.

“Dentro de lo que esperábamos dos derrotas en las primeras fechas es doloroso pero tenemos que pensar en lo que viene, levantar la cabeza y confiar en lo que estamos haciendo para revertir la situación.

Cada derrota duele pero tenemos que pensar ahora en lo que viene y reafirmar lo que estamos haciendo bien, tratar de hacernos más sólidos y poder empezar a sumar puntos”.

Por último Vilar finalizó expresando que deberá continuar trabajando en lo personal para tener mejor resguardado el arco fronterizo.

“Me he sentido bien pero como soy parte de este equipo tengo que dar más, mejorar y brindarme al servicio del equipo”.