La jornada tres de la Copa MX llega al Luis Pirata Fuente, donde Veracruz afrontará su segundo partido de la competencia enfrentando a un duro cuadro como León, que también vivirá su segundo cotejo en el torneo copero.

Los Tiburones Rojos llegan con el ánimo elevado tras su triunfo el fin de semana ante Puebla, mismo que ha servido para relajar el ambiente en el vestidor y calmar los ánimos de la gente, sobre todo tras el difícil comienzo de este año futbolístico para los dirigidos por Juan Antonio Luna. Dentro de ese difícil comenzar, se incluye la derrota sufrida en su debut dentro de la Copa MX, cuando cayeran por marcador de 1-0 ante los Alebrijes de Oaxaca, resultado que desató la molestía de los aficionados. Por ello, el equipo de Veracruz se presentará este miércoles ante la gran oportunidad de mostrar que la victoria en el Clásico del Sur no fue obra de la casualidad.

Por su parte, el equipo de León tampoco ha podido lucir de manera adecuada en el inicio de la temporada. Los dirigidos por Javier Torrente aún no saben lo que es ganar en Liga MX y lo malo que fue el torneo pasado no hace más que aumentar la tensión en un cuerpo técnico que parece podría caer en cualquier momento. Apenas el fin de semana, los de la Fiera lograron empatar in extremis frente a Cruz Azul al minuto 92'. Por otro lado, en la Copa MX ya poseen un triunfo, obtenido en calidad de local ante los Alebrijes por marcador de 3-2, aspecto que, de ganar hoy, los pondría en una posición cómoda para enfilarse a la siguiente ronda del torneo copero.

Cabe destacar que no se han registrado empates entre estos equipos desde el regreso de ambos a primera división, sin embargo, la balanza de carga muy a favor del cuadro de León con seis triunfos, mientras que Veracruz sólo ha obtenido dos.

Hombres a seguir

Melitón Hernández enfrentará a su exequipo y deberá realizar un buen papel, pues todo indica que la Copa MX será su única oportunidad de jugar en la temporada. Sus atajadas pueden ser fundamentales para obtener los tres puntos.

Darío Burbano no ha vuelto a ser el hombre desequilibrante y temible que fuera en su primera etapa con León. Sin embargo, tiene calidad mostrada para abrir espacios y ser una amenaza en este torneo para sus rivales, sobre todo ante una defensa frágil como la escuala.