Un clavo más al ataúd de Veracruz

Con tanto de Edson Puch vía penal, Necaxa selló, prácticamente, su permanencia en Primera División y, de paso, parece haber condenado a unos escualos que ven sus opciones cada vez más reducidas.

Un clavo más al ataúd de Veracruz
(Foto: Imago 7).
arturoarmas
Por J. Arturo Armas

La jornada 14 del Clausura 2017 se jugaba sobre el césped del Luis Pirata Fuente, donde unos necesitados Tiburones recibían a un Necaxa que llegaba con la misión de sellar su permanencia en primera división. Ante una entrada regular en el estadio, comenzaban las acciones.

Durante la primera parte, ambos equipos buscaban el arco rival, siendo Veracruz el primero en hacerlo vía Leandro Velázquez, quien al minuto dos impactó un balón que fue desviado de buena forma por Marcelo Barovero. El peligro escualo volvía al 21', de nueva cuenta con Velázquez, quien no alcanzó a cerrar un centro de Adrián Luna. Minutos después, era Pedro Gallese quien evitaba el tanto de Necaxa con un verdadero atajadón. Con muchas emociones, pero nula contundencia, se acababa la primera mitad.

Para el complemento, Veracruz entendió la necesidad de buscar el triunfo, por lo que adelantó líneas y mostró una actitud mucho más ofensiva, mientras que Necaxa se dedicó a replegar sus líneas e intentar asegurar el cero atrás, buscando explotar la velocidad de sus atacantes al contragolpe. Disparos de Bravo y Arévalo buscaban el gol escualo, pero se veían frustrados por el arquero hidrocálido. La tragedia llegó al puerto al minuto 61, cuando Antonio Briseño derribó a Fabián Espíndola dentro del área, marcándose la pena máxima para Necaxa, misma que Edson Puch no desperdició para adelantar a los suyos con un cobro a lo Panenka.

Con la ventaja, los Rayos se replegaron aún más y dificultaron la labor para los escualos, quienes ingresaron todo lo que tenían al frente sin obtener ningún resultado, salvo sustos para la visita, como en la recta final, cuando 'Pollo' Briseño sacó un cabezazo que el arquero desvió con buenos reflejos. Sin más, finalizaba el partido.

Con este resultado, Necaxa se ha salvado virtualmente del descenso, con lo que podrá intentar cerrar el torneo de manera digna y comenzar a planear su segunda temporada en el máximo circuito con tranquilidad. Por su parte, Veracruz pudo haber puesto el clavo final a su ataúd, pues no ha podido darle alcance a sus rivales directos en la porcentual y sus siguientes encuentros serán muy duros; aire de luto se respira en el Puerto.