Las derrotas son fáciles de analizar en los medios de comunicación. Sobre todo porque resaltan las carencias y dificultades que tienen los equipos que están sumidos en crisis o que no están pasando por una buena etapa. Esto es lo que se vio este domingo en la fecha siete del Apertura 2017 con los Pumas de la UNAM y su nuevo técnico: Sergio Egea al caer por 0-1 como visitante ante los Tiburones de Veracruz.
El que fuera el vicepresidente deportivo de la institución hace unos días y que fuera ungido de manera intempestiva por la directiva, ya había tenido sus 'pininos' en equipos como el Real Oviedo en España y el Altamira del Ascenso MX. Quizá, el paso más firme fue con los ibéricos, donde en aquella región pudo dejar una huella imborrable al subirlos a la segunda división.
Ante la baja de Nicolás Castillo, Mauro Formica y Gerardo Alcoba; el argentino solo pudo recurrir a las raíces del club con canteranos y jóvenes. Quizá el mayor cambio fue el meter un central más a la defensa para hacer linea de cinco, con el debut formal de Rodrigo González.
Además, pudo quitarle un poco la presión a Jesús Gallardo, por lo que ya pudo volver a su función de volante por izquierda y no de lateral fijo. El equipo entonces, pudo adelantar a Abraham González como un 'falso enganche' que se convertía otra vez en contención para hacer un trío de contenciones con David Cabrera y Marcelo Díaz, ya siendo títular con los universitarios.
Pero la carencia de atacantes se vio notoria con los jarochos y la terrible baja de juego de Joffre Guerrón (quien se perdió dos claras durante el partido) agudizó más la necesidad de buscar alternativas rápidas. Por lo pronto, aunque Formica no sea un delantero nominal, es un hombre que puede darle más facilidades a quien este arriba para empujarla a la red más fácilmente.
El gran error de Egea en su primer partido sigue siendo no ver lo evidente. Hay jugadores con muy bajo nivel que están sobrando en el cuadro titular como Bryan Rabello, Josecarlos Van Rankin y David Cabrera. Elementos que piden a gritos su titularidad como Brian Figueroa , quien no necesito un 'proceso' para estar en el primer equipo. Y sobre todo el trabajo constante en la parte baja, que es donde los auriazules siguen en las distracciones que han costado los resultados.
Ahora, que se pudo ver algo mejor que en las fechas pasadas también es cierto. Hubo más acompañamiento por las bandas. Mejor asociación por el centro. Y la incorporación del 'Chelo' para armar las jugadas desde atrás le hizo ser menos titubeante en el control de balón. Egea no puede ser juzgado tan duramente en su primer encuentro en el banquillo, aunque ahora es su trabajo quien hable por él para el próximo cotejo ante Celaya en la Copa MX.